miércoles, 30 de mayo de 2012

Nueva historia. Prólogo y Capítulo uno

 Besos de mayo...




Prólogo

  Dos años antes, en una habitación a oscuras
Lágrimas de importencia caían por mi rostro. ¿Quién iva a imaginar que algo así pasaría? Yo, desde luego, jamás lo hubiera pensado. Mi vida, aunque no era perfecta, ni mucho menos, era un vida llena de sensaciones, ilusiones, sentimientos... Pero no, aquél día, todo cambió. ¿Para bien? ¿Para mal? Eso aún no lo sé, la historia no tiene final, está en un punto intermedio, como entre la vida o la muerte. Sólo hay dos caminos: continuar y esperar a ver lo que pasa o parar, dejar que la historia termine aquí... Pero como comprenderéis, yo no soy así. Para mí sólo hay un camino válido, hecho con esfuerzo, dedicación, cariño, pasión... Es el camino de la vida misma. Y aunque ésta es la mayoría de veces muy dura, demasiado, aún no hay nadie que haya hablado con ella para poderle pedir ayuda... ¿O sí?
Aún no se sabe, o por lo menos yo no lo sé. No conozco a nadie que de verdad haya llegado a hablar con la vida... O con la muerte. Todo el mundo cree que ha pasado. Pero el truco está en una palabra: cree. Nada es seguro, simplemente piensan que es así. ¿Quién les ha dicho que de verdad eso pasara? ¿No pudieron ser perfectamente imaginaciones?
Mientras cabilaba sobre esto, recordaba ese momento. Mi encuentro con eso que muchos ni se atreven a mencionar... ¿Será la vida? ¿Será la muerte? O también puede que no sean ninguna de las dos... Siempre he odiado las preguntas de respuestas amplias, no es predecible, se sala el orden de lo normal.
¿Pero qué vida sería ésta si supiéramos ya todo? Por eso disfrutaba de los momentos, buenos y malos, me recordé a mi misma. Por eso... No, la verdad es que no los disfrutaba, sólo de los buenos, pero había pocos... Aunque, ¿quién iba a saber que ese nefasto día haría que las cosas buenas vinieran, alejaran poco a poco a las malas... pero sólo para dejarlas la puerta abierta de para en par después?

Capítulo uno

  Un caluroso día de verano
El cansancio estaba pudiendo conmigo... ¡Estas no eran horas para mantener una conversación tan...! Bueno, que no eran horas para hablar de nada y punto. Pero no, aquí estoy, repitiéndole por millonésima vez lo mismo y reciviendo la misma insolente e hipócrita respuesta... ¿No puede aceptarlo y ya está? El pasado es pasado, por mucho que afecte al futuro. ASí que más le valía callarse y no seguir insistiendo, porque como saliera a la luz, o simplemente con que yo pensara en ello, ya sería algo horrible...
Por lo que así estoy ahora, recapitulando, pensando y tratando de liberar mi mente de este contínuo tormento del que su contínuo hablar no me deja salir... La verdad es que no es nada complicado dado que tengo las cosas claras. Pero una cosa es tener las cosas claras y otra muy distinta entenderlas, si quiera llegar a comprenderlas...
Pero bueno, no iba a seguir pensando en esto... ¡Por supuesto que no! Hoy es mi día y me había esforzado mucho para que las cosas no se volvieran a repetir. Sé que esta vez todo era distinto. Y estoy feliz, muy feliz.
Una pequeña risa nerviosa se me escapa. ¿Cómo no reirme? Todo está saliendo bien, mejor de lo que en un principio creía... Así que dejaría que todo siguiera así, pienso, esta vez con una enorme sonrisa de satisfacción en mi rostro, todo podría  hacerse realidad, todo se cumpl...
El sonido de mi canción preferida me sacó de mis elucubraciones. Alguien me llama al móvil. ¿Quién será? No conozco a nadie tan loco para llamar a las dos de la mañana... Así que la intriga puede conmigo y recorro el breve espacio que separa mi cama de mi escritorio para ver que... No, no puede ser... Ésta vez se lo cojo. ¿Qué otra cosa podría haber hecho? Todo lo demás sólo habría empeorado las cosas...

jueves, 24 de mayo de 2012

Romántica suicida

Romántica... Suicida... ¿La convinación perfecta?

 



Soy la dulce muerte,
soy tu deseado destino,
soy aquel amante asesino
que cada noche va a verte.

Soy ese aliento en tu cuello,
soy esa sombra que no ves,
soy el que te deja sin resuello,
el que te sigue estés donde estés.

Ése momento en silencio,
callando muertes y temiendo
todo aquello de lo que sales huyendo
y lo que hace que vayas callendo.

La luna despunta en el cielo.
La hora de los muertos comienza.
Sal corriendo si tienes miedo,
pero a la muerte no hay quien la venza.

Una vez que todo empieza,
la luna es testigo silencioso,
que la ve con críticos ojos,
actuar con fiera belleza.

Un espectáculo que merece la pena,
ver marchar las almas al más allá,
sentir que la sagre en tus venas
con la misma melodía cantará.

De noche se encuentran los amantes.
De noche suceden los crímenes.
La noche oculta todo aquello que sus visitantes
esconden entre tintes y diamantes.

Y mientras el sol empieza a salir,
desde mi ventana puedo sentir
todo aquello que la noche me quiso transmitir,
todo sin lo cual no podría vivir...

Pero recordarte duele,
amarte cansa.
La muerte me teme,
el silencio nunca descansa.

Tras esa pared de acero,
que se fomó de la nada,
está lo que más quiero,
la libertad coartada.

La frustracion liberada
da paso y a la vez retrasa
a la muerte que me abraza,
que me saca de esta farsa.

Pero el dolor es tan dulce,
la amargura tan cariñosa.
Intentas que no te capturen,
corres para librate de una bochornosa,
bochornosa pero agradable,
muerte vestida de seda, hermosa,
y te aferras a un sentimiento interminable.

Y mientras el silencio te persigue,
dejas de huír del miedo,
te enfrentas con pasión a lo más temible,
miras al ya casi ocurecido cielo,
te das cuenta de que ha pasado un día más
pero te dices que eso jamás se repetirá
que esta vez te dejarás llevar.

La oscura noche se llena de luz,
tenbrosa, segura, apararentemente inofensiva, perspicaz,
que muestra claramente al trasluz
el momento en el que los muertos se van a disfrazar...

La luna despunta en el cielo.
La hora de los muertos comienza.
Sal corriendo si tienes miedo,
pero a la muerte no hay quien la venza.

Una vez que todo empieza,
la luna es testigo silencioso,
que la ve con críticos ojos,
actuar con fiera belleza.

De repente, una fiera llama cruza la noche,
la noche que crea un precioso broche,
un broche rojo carmín en la muñeca,
una muñeca sangrante, hueca,
al igual que la persona a la que pertenece,
que poco a poco enloquece...

La dulce locura, amada y deseada,
temida, odiada, pero a la vez tan añorada,
lo más querido que tu mente jamás soñara,
aquello que te cambiará para siempre el mañana.

Una suave presión hace reaccionar tus instintos,
sientes que todo es ahora distinto,
te intentas convencer de que la hora ha llegado
y que por donde la muerte vino tu pronto te habrás marchado...

Su codicia se estremece ante los rubís
que descienden por tu suave piel de marfil.
Empiezas a sentir que es correcto estar allí,
que es correcto terminar así...

La noche te empieza a arropar con su oscuro manto,
acalla tu angustioso llanto,
te obliga a no rendirte después de haber luchado tanto,
escuchas su dulce canto.

El temor empieza a invadir tu cuerpo,
luchas contra aquello que te quita la vida,
pero en el mundo de los muertos,
las reglas son únicamente matar a todo ser que viva.

Así que no puedes detenerte,
no puedes parar.
Poco a poco,
lentamente,
escuchas a tu corazón suspirar
y piensas que eres un loco.

Pero la muerte te lleva, te atrae,
tú simplemente te dejas caer,
dejas de luchar,
no te vas a enfrentar
a aquello que no puedes ver
a aquello que la vida te extrae.

Tu último y aungustioso pensameniento,
lleno de remordimientos,
te hace creer que todo es un cuento.
Y mientras te vas adormeciendo,
y la noche se acurruca a tu lado
cantando una balada, un triste llanto,
oyes aquellos versos,
y en el último momento,
susurran un triste beso
seguido de un amargo te quiero.


miércoles, 23 de mayo de 2012

Delirios de suicida...

Diario de una suicida

El silencio era magnífico. No se escuchaba nada a parte de mi respiración, la cual por momentos se realentizaba... Poco a poco iba perdiendo la fuerza, se iba consumiendo igual que mis ganas de seguir adelante... Sabía que estaba perdiendo esta batalla. Mi yo interior gritaba que parara, chillaba tan alto que esto era un error, que casi le hice caso...
Pero no, el miedo y demás sentimientos eran superiores a esa vocecita interior que me ordenaba parar... Sus chillidos eran molestos e incomprensibles... ¿Por qué parar ahora que he llegado tan lejos? ¿Por qué parar ahora que he encontrado la solución?
Sabía que era yo, y no esa vocecita interior, quien tenía razón. ¿Cómo lo sabía? Ni idea, era así y punto...
Mi mente estaba concentrada en una única cosa... Movimiento tras movimiento, realentizando mi aliento, perdiendo las fuerzas por momentos... Todo estaba saliendo justo como tenía que ser... ¿Entonces por qué vienen los remordimientos a mí? Pero no, ahh, el silencio, la tranquilidad, la oscuridad... Son tan cariñosos... Abrazan fuerte. Te obligan a no querer dejar escapar esos brazos que te devuelven la paz y precipitándote cada vez más rápido hacia ellos...
El silencio, ese silencio tan deseado, añorado... Interrumpido sólamente por un maldito ruido continuo, sólo ese ruido estropeaba mi paz... Me di cuenta de que algo goteaba, eran gotas que caían al suelo... Pero... ¿Gotas de qué?
En ese momento vi las manchas rojas y sonreí. Sí, ya me acordaba de qué eran esas gotas, ya sabía de dónde procedían... De mí. Verlo y razonarlo me produjo cierta angustia, pero los brazos y la voz susurrante, de aquello que en ese momento más anhelaba, tiraban más fuerte de mí. Reclamaban aquello que estaba dispuesta a dar, a pesar de haber creído que jamás lo haría...
Qué irónica es la vida, ¿no? Yo aquí, sabiendo lo que pasaría si seguía por ese camino, sabiendo que perdería muchas cosas, con la certeza de que perdería aquello que más había amado: la vida... Pero no, allí estaba, nadie me movería, tomé la decisión precipitadamente, cierto, pero una vez que comencé, no pude parar y sólo pude pensar en lo bien que se sentía ese silencio, esa paz, esa tranquilidad...
Lo bien que se sentían esos brazos llevándome hacia el final, viendo, sintiendo, mi último aliento... Ese aliento dedeciado a la vida y ofrecido a la muerte... Una dulce muerte, dolorosa pero deseada....

martes, 22 de mayo de 2012

La dura y no por ello menos comprensiva vida...

¿Qué es mi vida?



Ahora lo sé, es una sucesión de mentiras, de engaños, de traiciones... Es algo vacío, sin sentido. Lucho por un futuro incierto, lucho por algo imposible, lucho por tantas cosas que ahora me parecen tonterías, que a veces pienso en dejar de luchar...

¿Para qué luchar si la gente siempre te da la espalda? ¿Luchar para morir por quienes te dejaron de lado? ¿Luchar por algo que me parece inútil e insulso?



 
Pero sé que por mucho que me cueste y me duela, seguiré luchando, ya que es lo único que me mantiene viva, eso y las pocas amigas en las que puedo confiar, sé que no tengo nada más, sé que puedo perder todo lo que tengo en un pequeño parpadeo y sé que lo perderé, nada es eterno y la vida es un juego: si sabes jugar bien tus cartas, consigues llegar a algo parecido a la felicidad.

Pero si estás jugando con fuego, es ganar o morir, es conseguir que todos los demás pierdan para poder mantenerte tú, es ser cruel e hipócrita con los demás. Por eso una de las mejores opciones es dejar que las cosas pasen sin que nosotros intervengamos, ser unos meros expectadores de la vida, viendo cómo esta se ríe de nuestros intentos de mejorar...

 


¿Algo que doy por seguro? La muerte ¿Algo diario en mi vida? El sufrimiento... ¿Lo que más desearía y que es lo más escaso? Una simple sonrisa verdadera, un gesto de sincera amistad, un "Te quiero" dicho por la persona indicada, un " Pase lo que pase me tendrás a tu lado"...

Quiero cosas que la gente dar por seguras en su vida sin pensar que para otras es un bien escaso, incluso único, con el que solo pueden soñar...

Pero como bien acabo de decir, son sólo sueños, historias que la mente de una adolescente crea para que esta no se sienta tan mal, tonterías que esa chica quiere que sucedan, porque aunque puedan ser estupideces, son sus sueños... Los cuales no dejaré de perseguir hasta que ellos se harten de mi.



 
Así que, ¿qué es mi vida? La verdad es que ni yo lo sé, pero puedo asegurar que un día de estos lo descubriré, conseguiré todo lo que me proponga sólo por ver la cara que pondrán aquellos que me intentaron hundir. Verán que soy más fuerte que todos sus miedos por intentar superarme, verán que al final la vida da a cada uno lo que se merece.

Y aunque no sé qué me merezco, sé que algo tiene que haber por ahí para mi. Sólo me tengo que fijar bien, descubrirlo o buscarlo mejor. Me tendré que seguir esforzando, pero sé que merecerá la pena, aunque para ello tenga que pasar por miles de millones de sufrimientos... Merecerá la pena vivir, ser feliz y estar orgullosa de mi misma.

miércoles, 16 de mayo de 2012

Ser feliz duele

La felicidad está hecha de momentos tristes...



Hay momentos alegres, divertidos, locos, felices... Pero todos ellos no pueden exitir sin las malas experiencias, sin los malos momentos, sin esa tristeza que nos ayuda a valorar muchísimo más todo aquello que tenemos, por lo que luchamos y que nos hace seguir adelante. Por eso la felicidad está hecha de momentos tristes, porque es esa mismatristeza la que nos hace querer disfrutar más los buenos momentos.




Por todo eso cada momento es especial y hay que saber vivirlo, exprimirlo al máximo y aprender de él. Pero sobre todo, tenemos que disfrutarlo y guardarlo como un gran recuerdo que sabemos que jamás olvidaremos...

Y por último, dado que hoy no estoy de humor y lo siento mucho pero no puedo pensar en nada más que escribir cuando estoy así, quiero compartir algo con vostros que espero que comprendais y entendáis. No es mucho, es una simple frase, un simple carte de desmotivaciones.es y bueno, sólo decir que espero que sepáis ver más allá de las palabras, de esas letras sin sentido que forman un frase que reduce mi vida a nada, diciendo todo...

domingo, 13 de mayo de 2012

Una pequeña tontería de hoy

All we need is be together

Bueno, aquí os dejo parte de una canción que estoy escribiendo. Espero que os guste =)

We felt  love
We didn't think it was false
We tried to resist,
to did not desist,
to keep our love safe,
but the feelings strafe it
and now we are afraid of it ohhh

And now also,
we're gone on the wrong road
and then, and all
it's going worse
before we stop
i want you to think
If unless we drop
you will gonna be here.

sábado, 12 de mayo de 2012

Nobody said that live was easy...

 Pensamientos dormidos


Nacer, crecer, soñar, perder, vivir, morir . . .

Todos nosotros tenemos todo lo dicho anteriormente o si no, lo tendremos algún día... Es sencillo, la vida empieza cuando nacemos, ese momento, el más importante de nuestras vidas, y que por desgracia, o incluso a veces por suerte, nunca llegamos a recordar; depués de ese mágico momento, la vida consiste en saber vivirla, en poder crecer, en tener libertad para soñar, para tener esperanzas, para nunca perder las ilusiones que desde nuestra más tierna infancia nos acompañan, para no perder aquello que amamos, queremos o que simplemente apreciamos. Y es todo eso y mucho más lo que nos da la vida, pero no quiere decir que nos indique cómo vivirla, o que comparta con nosotros el verdadero sentido de la misma... Por eso todos tenemos algún día que morir, para poder apreciar todo lo que era la vida, todo aquello que nos fue concedido, aunque por un corto espacio de tiempo. Deberíamos morir por dejar a las futuras generaciones vivir sus propias vidas, con sus errores, con sus aciertos, con sus temores, con sus miedos... No podemos permanecer para siempre en un mundo que no nos necesita, podemos dejar una huella, cierto, a veces más perceptibles que otras, a veces más valoradas las malas y las que dañaron, que las que hicieron mejorar el pasado para conseguir un mejor futuro...

domingo, 6 de mayo de 2012

Sueños complicados

¿Por qué todo será tan complicado?

Los sueños se cumplen y se convierten en la odiosa realidad... 


 


Bueno, la verdad es que no estoy muy de acuerdo con el segundo título que he puesto, los sueños rara vez se cumplen, aunque sí, muchos de los que se cumplen se convierte en algo cotidiano que no valoramos y de lo que nos acabamos por cansar... Pero eso es un círculo vicioso, siempre pasará igual, por muchos sueños que cumplas, siempre te parecerá poco t siempre querrás tener más y más...

Cosa que es buena hasta cierto punto, cuando se convierte enuna obsesión deja de ser recomendable, deja de ser un sueño, la verdad, para convertirse en una meta que nos mantiene en vela, por la que harías lo que fuera, ya sea malo o bueno... Por eso muchas veces los sueños se deben quedar en lo que son, meras ilusiones que esperamos que se cumplan sabiendo que jamás eso llegará a pasar...




Pero hay momentos en los que soñar es nuestra única excapatoria, la salida de un mundo en el cual no estamos seguros ni nos gusta. Los usamos para imaginarnos una realidad ideal de la que nosotros somos dueños y señores y podemos hacer todo aquello que siempre hemos querido. En esos pequeños y plancenteros momentos de felicidad pensamos que todo es posible...




Pero esa felicidad suele durar poco, demasiado poco... Siempre hay algo que la estropea, siempre hay lágrimas derramadas, sueños rotos, sensaciones olvidadas y dolores permanentes... Siempre tendremos en nuestro ser algo que nos mate poco a poco aunque por fuera intentemos estar bien... Ese algo es lo que en realidad hace que todo duela más, nuestra conciencia. Se pasa las horas muertas a nuestro lado, repitiéndonos cada palabra, cada mirada, cada silencio... Y eso nos vuelve locos, nos destroza, nos hace caer en un pozo sin fondo del cual sabemos que pronto podremos tocar fondo y que jamás nos lanzarán esa cuerda esperanzadora que nos salvará... Sabemos que para salir de ahí tendremos que sufrir aún más, muchísimo más, hasta alcanzar la salida, que no por ello es buena. No siempre, pero sí la mayoría de veces, en la salidad de la oscuridad nos esperarán todos aquellos fantasmas que nos siguen a todas partes, persiguiéndonos hasta despiertos...





Por eso muchos nos escondemos en los libros, en esos grandes amigos que te cuentan historias de las que te hubiera gustado ser el protagonista simplemente para poder olvidarte de tu mundo...




Nos gustaría también viajar a esos lugares que salen en los libros para poder salir de la monotonía de nuestro día a día, para poder conocer algo más que la acera de en frente y las inmediaciones de tu propia casa...




Soñaríamos con vivir esos amores de cuentos de hadas en los cuales siempre hay una chica enamorada que consigue casarse con el apuesto príncipe que la adora y que siempre estará a su lado para todo lo que ella necesite...




Pero sabemos que eso es algo imposible... Jamás vivieremos esas vidas, jamás viajaremos a esos increíbles lugares, jamás encontraremos a nuestro príncipe azul... Siemplemente son sueños, bonitas ilusiones que no llegan a más y que siempre estarán ahí, bellas pero mortales, acabando poco a poco con nuestra vida y convirtíendonos en seres que viven sólo para hacer toda la vida lo mismo...




Y como yo no soy la excepción y la verdad es que tampoco desearía serlo (porque sí, sería feliz, pero sería una felicidad de mentira...), pues por todo eso estoy donde y como estoy... Es complicado, quizá dificilísimo, pero es mi vida y sólo yo sé como vivirla. Y aunque a veces sea más dura de lo normal, resistiré con una gran sonrisa, para que los problemas salgan por la puerta por la que entraron o para que esa misma felicidad me ayude a solucionarlos...




Lo que sí sé es que por mucho que haya dicho anteriormente, jamás dejaré de soñar, jamás perderé las esperanzas y, quién sabe, puede que algún día se cumplan y pueda decir que de verdad los sueños se vuelven realidad, aunque luego esa realidad aburra. Por lo menos podré decir que cumplí mi sueño y que por un tiempo, fui la persona más feliz del mundo.



Smile =)

viernes, 4 de mayo de 2012

Desempolvando mi vida... Desempolvando mi guitarra

Cuarta parte



No quiero escribir un final a mi historia. Sé que todavía no ha acabado y que me queda mucho, muchísimo por vivir. Pero al igual que sé que las cosas buenas vendrán, también sé que las heridas que el pasado me causó no se irán. Siempre estarán ahí, recordándome que sólo puedo confiar en mí misma y que a pesar de lo que los demás digan, por mucho que me quieran, sé que mi vida la tengo que vivir yo sola…
Es duro pensar que estás sola, que por mucho que intentes contar con los demás, tarde o temprano te fallarán. Pero nadie es perfecto y eso es una lección que yo aprendí cuando aún debía seguir jugando con muñecas, inventándome mundos en los que todo era perfecto y en el que las amigas eran amigas de verdad. Pero para mí, eso no está bien. De pequeños nos enseñan una visión idealizada del mundo, en la que toda la gente puede hacer lo que quiera sólo con desearlo y en la que conseguir cualquier cosa que imagines no sólo es posible, si no que es algo seguro.
Pero la realidad es muy distinta. Demasiado distinta. Gente muriendo por conseguir un simple sueño, personas dando sus vidas por conseguir una mísera participación en un mundo de locos en el cual, poco importamos aquellos que queremos solucionar las cosas. Sólo importan los que prometen sin cumplir, interesa más el dinero, la posición social, la raza, que el amor, la paz, la solidaridad, el ayudar a quien de verdad lo necesita…
Con el paso del tiempo, los valores que importaban en esta vida han ido cambiando, confundiéndose con otros que nos han hecho volvernos como ahora somos, seres sin capacidad de raciocinio, controlados por una sociedad que nos quita el dinero, la vida, la salud, la ilusión…
Somos meras marionetas de los poderosos. No somos nada porque no podemos hacer absolutamente nada. Todos los intentos de la humanidad por mejorar se ven interrumpidos por la ineptitud, la pobreza, el hambre, las enfermedades, por todo aquello que de una forma u otra no tiene cura o no puede sobrellevarse. Pero el esfuerzo de unos pocos, aunque importante, es inocuo, no sirve de mucho si por cada buena acción que hagamos, hay otras mil malas cometiéndose en ese mismo instante.
Por lo que debemos ser fuertes por nosotros mismos, no debemos rendir cuentas a nadie más, porque al final de nuestras vidas, somos nosotros nuestros únicos jueces y verdugos. Juzgamos nuestros propios actos y morimos poco a poco al darnos cuenta de lo que hicimos… Pero eso ya no tiene solución, todo aquello que creíamos que nos hacía fuertes y poderosos, solo alimentaban la furia de ese ser que nos espera al final del camino, nuestra propia conciencia…
***
Pero en ese instante, cuando yo pude volver a coger mi guitarra, me olvidé de todos esos pensamientos que nublaban mi cabeza, solo pensaba en mí misma, en lo feliz que estaba en ese momento. Y que si la vida era complicada, lo aceptaría con una sonrisa en mi cara y seguiría luchando por todo aquello que amaba sin dejar que nada me intimidara y me hiciera abandonar mi camino hacia la tierra de los sueños cumplidos…

Fin

miércoles, 2 de mayo de 2012

Esperanzas, ilusiones y nuevas sensaciones

Un nuevo comienzo...


Los sueños y las ilusiones nacen juntos y juntos pueden formar un nuevo futuro, nuevas perspectivas y nuevos proyectos. Pero todo necesita un pequeño empujón, que a veces puede hacer que nos caigamos al suelo y nos dañemos, pero debemos levantarnos y seguir adelante para conseguirlo. Y aunque después sea muy difícil, merecerá la pena si es lo que nosotros queremos.

Por eso debemos seguir viviendo a pesar de los malos momentos. ¡Debemos seguir sonriendo! Igual que nadie se merece nuestro sufrimiento, nadie, y menos aquellos que nos lo han hecho pasar mal, se merecen la satisfacción de ver que hemos caído... Por todo ello debemos de estar felices, aunque no nos creamos capaces, por muy difícil o complicado que lo veamos...
Siempre será mejor el placer que produce una sonrisa al dolor que da una derrota...

Y lo que más nos ayuda con todo son nuestros sueños, también llamados esperanzas o ilusiones... Son los que nos ayudan a mantenernos firmes y a seguir nuestro camino, porque por muy duro que sea, nos hace imaginar que lo que hay al final, la recompensa tan esperada, merece la pena. Los sueños pueden ser sólo sueños y no llegar a cumplirse jamás o pueden convertirse en la realidad, que aunque a veces parezca dura y fuera de lugar, en ella siempre habrá un huquecito para todos esos momentos de felicidad que no sólo debemos vivir, sino de los que debemos aprender para que cuando estemos en la oscuridad, podamos recordad cómo devolver la viveza a nuestras vidas.



Y nunca, nunca jamás debemos rendirnos. Por muy mal que hagamos las cosas, por mucho daño que nos hagan o por muy difíciles que veamos las cosas, jamás debemos dar nada por perdido. Podemos intentarlo una y otra vez y no salirnos hasta que haya pasado un montón de tiempo o puede que después del cuarto o el quinto intento nos salga; incluso puede que a la primera. Pero eso no lo sabremos si no lo intentamos. Y es mejor fallar sabiendo que por lo menos quisiste conseguirlo, buscaste los medios, probaste y no lo conseguiste, a quedarte con la duda de qué habría pasado si lo hubieras intentado...


Y aunque por desgracia nada es para siempre, tendrás el recuerdo, algunos mejores que otros, pero todos igual de bellos e indispensables en tu vida. Sin ellos no serías quien eres ni podrías ser quien serás en un futuro no muy lejano. Por eso hay que disfrutar del momento, de cada sentimientos, de todas las nuevas sensaciones, porque podrían ser la última vez que las vivieras... Por eso mejor guardar un "para siempre" y sustituirlo por un "ahora". Porque tenemos que vivir en el presente, ¡en este mismo instante! No podemos dejarnos guiar por sentimientos dañinos del pasado o falsas ilusiones de futuro, no. Tenemos que vivir nuestra vida según nos dicta cada momento de ella, sin miedo, con firmeza y seguridad.



Así que por último os dejo esta maravillosa frase que resume toda esta entrada. Una frase que nos anima a seguir adelante a pesar de las vicisitudes que se interpongan en nuestro camino. Debemos vivir y dejar vivir por un mejor futuro mientras vivimos el presente que nosotros mismos hemos elegido con nuestras dudas, miedos y decisiones del pasado.

¡¡ Wake up and live !!